
melancolía para morir.
Luego de todo el estruendo tenebroso de gritos y lamentos emitidos por un poema asesinado en prosa sobre una libreta cualquiera decido darme cuenta que sigo siendo el mismo iluso enamorado del amor, ilusionado con una historia no escrita en el libro de mi vida, esperando sentado un cruce de miradas etéreas, un nombre, un abrazo fuerte.
Una elección hecha que marcó mi camino. Estuve dispuesto a seguir la misma senda, cumplir las profecías, fluir con mi destino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario